- Sacarina: es un clásico entre los edulcorantes artificiales. Descubierta en 1879, la sacarina es 300 veces más dulce que el azúcar y pasa por el cuerpo sin dejar rastros, ya que no aporta calorías. Se la puede utilizar para comidas calientes o frías. Es recomendable evitarla durante el embarazo y la lactancia.
- Aspartame: El aspartame es 180 veces más dulce que el azúcar y provee muy pocas calorías. Se puede utilizar en comidas frías o calientes, aunque puede perder un poco de sus propiedades endulzantes a temperaturas elevadas. Este edulcorante ha recibido cuestionamientos por parte de algunos usuarios, quienes dicen que les provoca jaquecas, mareos, náuseas, fatiga y otras sensaciones.
- Acesulfamo-k: Este endulzante es aproximadamente 200 veces más dulce que el azúcar y se puede utilizar en comidas frías y calientes. Además, es termoestable, es decir que no pierde sus propiedades por la acción del calor, por lo cual se puede usar para cocinar y hornear.
- Sucralosa: Es 600 veces más dulce que ésta (el doble que la sacarina). La sucralosa es el único edulcorante sin calorías que se fabrica a partir del azúcar y se utiliza en su reemplazo para bebidas de bajas calorías y alimentos procesados. Muchos alimentos procesados y bebidas dietéticas la contienen.
- Ciclamato: este edulcorante es 30 veces más dulce que el azúcar pero su uso se ha prohibido en los Estados Unidos, debido a que en 1970 se demostró que había causado cáncer de vesícula en los animales.
EDULCORANTES
Existen varias opciones artificiales para endulzar la vida y las comidas. Si bien la función es la misma (reemplazar al azúcar para endulzar las comidas y las bebidas), las características son diferentes en cada uno de ellos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario